Sin embargo, el tiempo es sabio y lo que hoy es hoy y mañana será anteayer pasado mañana, y será entonces cuando pasaré de pensar que ya nada tiene sentido y lograré que cada detalle recobre su valor.
En todos los viajes que merece la pena hacer llega un momento en que estás tan lejos del comienzo como del destino. En ese momento todo parece perder sentido. Ahora estoy en el medio del camino, pero confío en que, al final, habrá una deseada recompensa.
1 comentario:
Los caminos nunca llevan manual de instrucciones ni señalizaciones, es más, a algunos les faltan la mayoría de las balizas. Además, lo que para muchos vale para otros no, e incluso la misma guía que llevábamos no sirve al segundo siguiente.
Pero los caminos no los hacemos solos. Es cierto, muchas veces nos sentimos así, y en no pocas sabemos que ese camino lo tenemos que realizar nosotros, aunque no vayamos solos y en los márgenes del mismo nos apoyen y ayuden.
Pero, lo que es cierto de verdad, es que los caminos los hacemos las personas. Y en este caso especialmente, las personas que los hacen valen tanto que el camino llevará al destino deseado y merecido.
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